Desafortunadamente, encontrarse con situaciones de impago de renta en un alquiler es bastante habitual. Por eso es altamente recomendable asesorarse correctamente para conocer los pasos a seguir para recuperar el inmueble en cuestión y reclamar el dinero adeudado por parte del inquilino.

Lo primero que debería hacerse en caso de encontrarnos en este supuesto es una reclamación extrajudicial en forma, por ejemplo, de burofax. De esta forma el arrendador demostrará buena fe necesaria previa al procedimiento judicial. La respuesta por parte del inquilio será un importante indicador de las dificultades que puede llegar a tener y de la necesidad de interponer una demanda.

Una vez presentada la demanda en el juzgado, éste tramitará el desahucio señalando día y hora para producirse el lanzamiento, sin perjuicio de lo que pueda alegar el arrendatario.

En cuanto a la renta debida, una vez exista sentencia por la que condene al inquilino al abono de la cantidad reclamada, deberá pagarla. Si no lo hiciere, el arrendador deberá interponer demanda ejecutiva para intentar el embargo de los bienes del inquilino, saldos en cuentas bancarias o nóminas.